Un nuevo tratamiento elimina el acné sin medicamentos
Un nuevo sistema que combina la succión con luz de banda ancha para eliminar la grasa y limpiar los poros de la piel combate el acné sin medicamentos. Es el único tratamiento aceptado por la Food and Drug Administration (FDA) estadounidense para tratar acné severo y para el acné moderado y ligeramente inflamado.
Esta afección cutánea se produce cuando el organismo segrega demasiados andrógenos, unas hormonas que estimulan las glándulas sebáceas aumentando su tamaño e incrementando la producción de sebo. Este aumento al juntarse con las células muertas bloquea los folículos pilosos y las glándulas sebáceas produciendo los granos típicos del acné.
Hasta ahora el tratamiento más común era la ingestión de medicamentos como la isotretinoína, no aptos para todo el mundo por sus efectos secundarios.
El nuevo tratamiento es una alternativa real para las personas que no toleran o no quieren tomar esos medicamentos.
El sistema consiste en vacíar el poro, succionando las impurezas que genera el acné, aplicando la luz posteriormente, que, a modo de láser, “destruye las bacterias que acusan el acné y elimina la grasa y las células muertas.
Esta luz de banda ancha es la misma que utilizan los equipos de luz pulsada intensa (IPL) con una longitud de onda de entre 400 y 1.200 nanómetros.
Duración del tratamiento
Según las especificaciones de Solta Medical, la empresa americana que ha desarrollado el tratamiento, el proceso requiere de una media de 4 sesiones, siendo necesarias algunas de recuerdo en ciertos casos.
Cada sesión dura unos 15 minutos si se aplica sobre el rostro, y una media hora si es en la espalda, siendo completamente indoloro según comenta la marca. Antes del tratamiento se prepara la piel, humedeciéndola con un poco de agua.