Que saber sobre el pimiento
El pimiento es el fruto de una planta herbácea que pertenece a la familia de las Solanáceas y, en concreto, al género Capsicum. Las Solanáceas son una gran familia, con casi 75 géneros y unas 2.300 especies de plantas productoras de alcaloides tóxicos, entre las que se incluye la belladona, la mandrágora y el beleño. Son pocas las solanáceas comestibles, aunque entre ellas se encuentran algunas que en España no faltan en la dieta de cualquier hogar, como el pimiento, el tomate y la berenjena.
Hoy vamos a hablar sobre el pimiento, una planta originaria de México, Bolivia y Perú, que llegó a Europa en el primer viaje realizado por Colón en el año 1492 a América. En América, los indígenas lo llamaban chili, pero los españoles lo bautizaron con los nombres de pimiento y pimiento de Brasil.
En el siglo XVI empezó a cultivarse ya en nuestro país, extendiéndose a Italia y a Francia para dar el salto al resto de Europa y el mundo.
Propiedades nutritivas del pimiento
El principal componente del pimiento es al agua y los hidratos de carbono, siendo una hortaliza de bajo aporte calórico. Es una buena fuente de fibra y como el resto de verduras, su contenido proteico es muy bajo y apenas aporta grasas.
En cuanto a su contenido en vitaminas, los pimientos frescos son muy ricos en vitamina C, sobre todo los rojos. La vitamina C, además de ser un potente antioxidante, forma parte de la creación de colágeno, glóbulos rojos, huesos y dientes, al tiempo que favorece la absorción del hierro de los alimentos y aumenta la resistencia frente a las infecciones.
Son buena fuente de carotenos, entre los que se encuentra la capsantina, pigmento con propiedades antioxidantes que aporta el característico color rojo.
También es destacable su contenido de provitamina A (beta caroteno y criptoxantina) que el organismo transforma en vitamina A conforme lo necesita, esencial para la visión, el buen estado de la piel, el cabello, las mucosas, los huesos y el buen funcionamiento del sistema inmunológico.
Entre los minerales, cabe destacar la presencia de potasio, necesario para la transmisión del impulso nervioso y la actividad muscular.
Como elegirlos
A la hora de realizar una buena elección se deben elegir aquellos ejemplares, carnosos y duros, firmes y de color brillante, sin golpes o magulladuras. Si poseen arrugas o manchas significa que han estado almacenados durante demasiado tiempo, lo que provoca una pérdida de nutrientes y de sabor.
Otra señal de buen estado es su tallo, que ha de ser verde, firme y crujiente.
En casa, lo mejor es guardar los pimientos en la nevera en una bolsa de plástico perforada, pudiendo llegar a aguantar hasta 15 días.
Una vez asados y pelados, se pueden guardar en conserva o congelarlos, para poder disponer de ellos en el momento deseado.