Células cardiacas fabricadas por encargo
El mes pasado Cellular Dynamics International (CDI), con sede en Madison, Wisconsin, hizo los primeros envíos de células derivadas de las propias células madre personales. Estas células pueden llegar a ser útiles para que los investigadores estudien desde la toxicidad de fármacos nuevos o ya existentes hasta la electrodinámica de células cardiacas tanto sanas como enfermas.
Estas células cardiacas (llamadas Cardiomiocitas iCell), se obtienen mediante la extracción de células de la propia sangre de una persona (y otros tejidos) y su inversión química hasta hacer que regresen al estado pluripotente. A partir de aquí, son capaces de transformarse o ser programadas para convertirse en cualquier célula del cuerpo.
Una de las grandes ventajas de estas células es que se pueden generar en grandes cantidades y a petición del interesado. Anteriormente, se obtenían de cadáveres lo que hacía que su suministro fuera mucho más limitado.
CDI diseñó las células cardiacas principalmente para ayudar al descubrimiento de fármacos y para predecir la eficacia y la toxicidad de los distintos medicamentos. Las células también permiten a los investigadores poner a prueba las células provenientes del mismo grupo de células madre durante el tiempo que tardan en desarrollar los fármacos, que puede ser un periodo de años. Los investigadores también pueden comprobar los fármacos en células de distintos tipos de pacientes para ver si hay reacciones diferentes, y estudiar la razón por la que algunas células se enferman.
Debido a esto, las células IPS derivadas para el corazón y otros tejidos puede que algún día sean el complemento genético perfecto para reparar de forma efectiva los tejidos dañados del corazón y en otras áreas, aunque las células IPS derivadas aún no se pueden usar como piezas de repuesto ya que aún no se sabe cómo injertarlas y hacer que crezcan en los tejidos humanos.
Las células IPS son genéticamente e inmunológicamente compatibles con la persona que proporciona las células originales. Esto significa que las células cardiacas y de otro tipo producidas a partir de las células IPS son serán rechazadas por el sistema inmune de la persona, lo que siempre resultaba posible con las células provenientes de donantes, animales o cadáveres.
Fuente: www.technologyreview.com